¿Cómo elegir un proveedor para el mobiliario urbano?

Las autoridades locales contactan con proveedores de mobiliario urbano para equipar el municipio en beneficio de sus habitantes, con productos y servicios que faciliten el desplazamiento, la convivencia y mejoren la calidad de vida. Pero, ¿cómo decidir entre los proveedores?

Criterios para elegir un proveedor de mobiliario urbano

  • Por razones estéticas, es preferible elegir equipos y materiales con formas, colores y estilos idénticos. Por lo tanto, el número de productos ofrecidos por el proveedor es un criterio determinante de elección. Cuanto más pueda ofrecerle una gama de mobiliario urbano coherente y complementario, más satisfechos estarán los usuarios. Los modelos demasiado mal formateados o los colores sombríos deben evitarse. 
  • La posibilidad de personalizar el mobiliario urbano también es importante para las ciudades y municipios que desean tener una imágen única. 
  • Con el auge de las nuevas tecnologías y la amplificación de la lucha contra el calentamiento global, el negocio de los proveedores de mobiliario urbano está evolucionando. Actualmente, el objetivo de las instalaciones públicas es conectarse a las redes consumiendo el mínimo de energía. Por lo tanto, la capacidad innovadora de un proveedor de servicios es un activo innegable muy importante. 
  • El cumplimiento de las normas de accesibilidad es un desafío para todas las autoridades locales: el mobiliario urbano debe acompañar y facilitar el desplazamiento de las personas con movilidad reducida. El proveedor debe estar atento a la evolución normativa regional, nacional y paneuropea en este ámbito. 

Por último, el desarrollo de modos de transporte alternativos está empujando a los municipios a instalar aparcamientos para bicicletas y coches eléctricos.

 

 

El control del coste total del mobiliario urbano

La elección de proveedor de mobiliario urbano está obviamente condicionada por el coste total de los productos, incluyendo el coste de compra y el coste de mantenimiento. 

Como resultado, las comunidades tienden a recurrir a materiales reciclados o plásticos, ya que son más fáciles de limpiar y reemplazar.

Aún para reducir más los costes, los municipios están cada vez más interesados ​​en las islas combinadas que incluyen bancos públicos con cestas, ceniceros y farolas. Muy prácticas y fáciles de montar o mover. Además, evitan la fragmentación del espacio público causada por la multiplicación del mobiliario urbano. 

Por razones tanto ecológicas como económicas, las autoridades públicas tienen cada vez más interés en instalar mobiliario que consuma poca energía o utilice energías renovables, por ejemplo, farolas con paneles solares.

 

La compra de una papelera urbana