¿Quieres proteger a tus empleados o luchar contra el robo? ¿Quieres ser notificado inmediatamente en caso de problemas dentro de tu empresa? La videovigilancia (CCTV) y la televigilancia o monitoreo remoto son una solución eficaz.
Videovigilancia y televigilancia: su funcionamiento
CCTV: mantén un ojo en tu local
El circuito cerrado de televisión (o videovigilancia) es un sistema de seguridad que incluye la instalación de una o varias cámaras dentro o fuera del lugar elegido. Algunas de ellas cuentan con un dispositivo de aviso (por teléfono, SMS, correo electrónico) que te avisa cuando detecta una situación anormal. Este dispositivo de protección previene asaltos, robos... en los lugares donde esté instalado.
La monitorización remota: llamar a los especialistas
La televigilancia incluye un sistema de detección (video o no) y una alarma. Además, todo está conectado a una empresa especializada, cuyos empleados se encargan de las alertas recibidas y de desencadenar la respuesta apropiada.
- Detección: el sistema de monitorización remota detecta un peligro, por ejemplo, de alto calor o humo, los primeros signos de un incendio.
- Recepción: la compañía de seguridad responsable del sistema es alertada.
- Eliminación de la duda: el operador comprueba la realidad del peligro.
- La intervención: se alerta a los servicios de emergencia, responsables locales, si es necesario (fuego...) y pueden enviar un guardia de seguridad, de acuerdo con el contrato firmado con el propietario.
Una vez cerrado el caso del incidente, la compañía de monitoreo le entrega un informe al cliente.
¿Qué valor tiene para la empresa?
La videovigilancia y el monitoreo remoto permiten un seguimiento exhaustivo y completo de tu negocio. Permiten proteger a distancia las instalaciones de tu negocio 24/7. Estos sistemas no sólo avisan en caso de problemas, también pueden guardar las imágenes, lo que permite identificar a los culpables, si los hay. De este modo, la visualización de imágenes te permite como empresario:
- Vigilar tus bienes.
- Garantizar la seguridad de las personas.
- Identificar a los autores.
- Disuadir a posibles intrusos, que probablemente roben o dañen tu propiedad o, pongan en peligro la seguridad de tu personal.
Además de las funciones de seguridad, el circuito cerrado de televisión (CCTV) también se puede utilizar para contar las entradas y salidas de una tienda.
