La externalización de la contabilidad de una empresa consiste en confiar a un profesional externo, todo o parte de la gestión contable. ¿Cómo funciona esto? ¿Cuáles son las ventajas de esto? ¿Hay frenos al utilizarlo?
Externalización contable, un principio operativo simple
La subcontratación de la contabilidad es una transferencia de habilidades a un profesional calificado. Para ello, el gestor de la empresa puede elegir entre las siguientes opciones: una firma contable o asociación de gestión y contabilidad.
La ejecución de todas o parte de las operaciones contables está encomendada a uno de estos profesionales, que se encargará de asegurar según la misión que se le confíe:
- Contabilidad general y analítica
- Contabilidad de deudores y acreedores
- Declaraciones de impuestos
- Gestión de nóminas y declaraciones sociales
- Asistencia legal
- Coaching de gestión (dashboards...)
Los profesionales contables ofrecen una amplia gama de servicios externalizados. La operación es sencilla: la "carta de misión" formaliza y contrata la relación entre la empresa cliente y el profesional durante la duración de la misión.
¿Por qué elegir la subcontratación?
Iniciar una operación de subcontratación es el resultado de una reflexión que revela varios activos importantes:
Falta de recursos internos y eficiencia operativa
No todas las empresas pueden tener un presupuesto y personal suficientes para un contable interno. Delegar esta función a un profesional reduce considerablemente el nivel de sueldos y gastos. La subcontratación genera así ahorros sustanciales.
La búsqueda de expertos
La contabilidad, la fiscalidad y el derecho laboral son cada vez más complejos y requieren conocimientos y técnicas que no pueden improvisarse. Hay tareas que a menudo es mejor dejarlas en manos de expertos. ¡Un error puede salir muy caro!
Cumplimiento de las obligaciones legales y garantía de cobertura
Las obligaciones de información están sujetas a un calendario estricto. Olvidarse de hacerlo puede provocar multas y retrasos. El uso de la subcontratación puede ayudar a reducir este riesgo.
Además, un contable es responsable de los errores o retrasos en las declaraciones, una garantía para el jefe de la empresa.
Reorientación de la actividad principal
Para liberarse de las múltiples tareas contables y administrativas ofrece una empresa como un activo importante para poder mantener el foco en la realización de su actividad, para poder movilizar su fuerza de trabajo en su negocio principal.
Los frenos de la externalización
Algunas empresas todavía dudan en externalizar sus servicios. Hay varias razones para esto:
- Pérdida de control: el compromiso a medio y largo plazo ha dado lugar a una cierta sensación de pérdida de control por parte de los directivos de la empresa.
- Pérdida de confidencialidad: contratos, patentes técnicas, datos de proveedores, precios de compra, márgenes... son datos valiosos que a una empresa no le gusta revelar, ni siquiera a un contable colegiado. Este temor a la pérdida de confidencialidad sigue bloqueando a algunas empresas.
- Coste de la operación: Con tarifas horarias medias que oscilan entre 50 € y 150 € sin IVA, dependiendo del nivel del profesional de la empresa, el presupuesto anual oscila entre 1500 € y 3 000 € para la elaboración del balance y de las cuentas anuales. El presupuesto para la subcontratación contable a veces puede ser considerable.
Sin embargo, en la práctica, el equilibrio estará a favor de la externalización porque los beneficios superan a los inconvenientes.
